http://www.laverdad.es/murcia/20121119/mas-actualidad/sociedad/familia-valenciano-201211191637.html
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Los familiares del joven valenciano muerto el sábado por la mañana en el aeropuerto romano de Ciampino esperan en la capital italiana a que se le practique la autopsia para aclarar las causas de su fallecimiento, después de haber reconocido el cuerpo.
Así lo aseguró hoy a Efe uno de los familiares de J.L.M, Damián González Peiro, quien añadió que el joven -de 25 años y residente en Gandia (Valencia)- llegó a Roma conduciendo un camión de mercancías y que, tras discutir con su compañero, decidió regresar a España.
El joven convivía en Gandia con una mujer de 24 años con la que tenía un bebé de siete meses, medía 1,80 centímetros y pesaba 120 kilogramos, relató González.
"No estaba en Italia de mochilero, estaba trabajando, discutió con su compañero y nos pidió que le compráramos un billete de regreso", señaló.
Según el familiar, el billete aéreo no tenía como destino Barcelona, como se ha informado estos días, sino que era para un vuelo hacia Madrid que salía hacia las nueve de la mañana del sábado.
El padre del chico y el de su novia, junto a Damián González, se han trasladado a Roma para reconocer el cadáver y esperar los resultados de la autopsia y la repatriación del cuerpo.
La Policía sólo ha facilitado las iniciales del joven, J.L.M, y que nació en 1987.
El jefe de la Policía de Fronteras del aeropuerto, Antonio Del Greco, explicó a Efe que sobre las 07.00 hora local del sábado (06.00 GMT) el joven se saltó el control de embarque y corrió por la pista hacia un avión de Ryanair que estaba embarcando a los pasajeros para poner rumbo a Bari, en el sur de Italia.
Consiguió llegar a la escalerilla, pero los asistentes de vuelo no le dejaron pasar al explicarle que el aparato iba a Bari y él no tenía la tarjeta de embarque para ese vuelo, ya que su destino era España.
Tras la negativa del personal del avión a dejarle entrar, el joven se agarró a la barandilla de la escalera y se negó a bajar, por lo que los asistentes llamaron a la policía del aeropuerto.
De acuerdo con la reconstrucción de Del Greco, la policía consiguió bajarle de la escalerilla, pero el chico "se encontraba muy alterado" y con un comportamiento "violento", por lo que se decidió que acudiese una ambulancia.
Los médicos le inyectaron un sedante y le colocaron en una camilla, pero poco después en la misma pista el joven perdió el conocimiento y murió, a pesar de que intentaron varias veces reanimarle.
Fuentes diplomáticas españolas indicaron a Efe que se cree que el chico sufrió un infarto, aunque será la autopsia la que determine los motivos de la muerte.